Cada nuevo expatriado en Valencia se enfrenta a la misma (espinosa) pregunta: ¿cómo encontrar un alojamiento adecuado en esta dinámica ciudad? Sobre el papel, el método es bastante sencillo y consta de tres estrategias, cada una con sus ventajas y desventajas: portales inmobiliarios y sitios de anuncios clasificados, agencias inmobiliarias locales o incluso el boca a boca. Sin embargo, encontrar una base en Valencia puede ser una verdadera carrera de obstáculos… Primer consejo para un nuevo expatriado en España: la Península Ibérica no es ni Francia ni Bélgica… Ten esto en cuenta.
Explora portales y anuncios inmobiliarios en España
Utilizar portales inmobiliarios o aventurarse en sitios de anuncios clasificados ofrece una comodidad innegable: ¡la de no tener que desplazarse para iniciar la búsqueda! El método, práctico y rico en opciones, le permite iniciar el proceso desde su sofá, pero esto significa que se basará principalmente en las descripciones de los anuncios, que varían en detalle. Sin embargo, persisten las dudas: ¿está correctamente indicada la dirección? ¿Las fotos reflejan la realidad reciente de la propiedad? ¿Cuál es el estado real del entorno que rodea el alojamiento? ¿La propiedad todavía está disponible?
Para los residentes actuales en España que dominan el idioma, esta opción es muy viable. En cambio, para los que están en el extranjero la situación es más compleja, sobre todo en el caso de los alquileres, sean estudiantes o no. El mercado del alquiler se caracteriza por su volatilidad: la demanda es alta y la oferta limitada, lo que exacerba la competencia. Los residentes locales pueden viajar rápidamente para realizar una visita, una ventaja decisiva ya que las propiedades se pueden alquilar incluso antes de que un candidato internacional llegue a Valencia.
Hay que tener en cuenta también que la vida útil típica de un anuncio de alquiler en Valencia apenas supera una semana, y un anuncio que dura muchas veces es sinónimo de complicaciones: alquiler excesivo, mala ubicación o estado insatisfactorio del alojamiento. Para una compra, aunque los plazos son un poco más indulgentes, la competencia sigue siendo feroz, especialmente si la propiedad interesa a los inversores, pudiendo así eclipsar un excelente negocio.
Utilizar agencias inmobiliarias en Valencia: un enfoque de doble filo
Para aquellos que no han encontrado su futuro alojamiento en portales inmobiliarios, recurrir a agencias inmobiliarias parece ser el siguiente paso lógico, al menos sobre el papel, ya que estos profesionales conocen perfectamente su zona geográfica y disponen de un catálogo de bienes disponibles. También es de esperar que hablen francés, dado el número de expatriados en España. Pero la realidad sobre el terreno a veces resulta ser muy diferente…
En la Comunidad Valenciana el sector inmobiliario no está regulado, y concretamente esto significa que cualquiera puede abrir una agencia inmobiliaria. El lunes, es posible que te encuentres con una persona que dirige un bar y, la semana siguiente, es muy posible que la misma persona esté dirigiendo su propia agencia inmobiliaria. Esta ausencia de un marco regulatorio provoca considerables fluctuaciones en el panorama de las agencias inmobiliarias, con frecuentes aperturas y cierres y, en consecuencia, una calidad del servicio que puede ser muy variable.
Por tanto, es aconsejable favorecer agencias con una sólida reputación y una larga experiencia en el sector, aunque esto no garantice siempre la excelencia. De hecho, las agencias inmobiliarias en Valencia operan de manera diferente a sus homólogas francesas, con prácticas mucho menos estructuradas y formalizadas.
¿Qué pasa con el boca a boca?
Si tiene familiares o amigos localmente en Valencia, esta es una bendición para cualquiera que busque establecerse sin pasar por las rutas inmobiliarias tradicionales, ya que a menudo pueden conectarlo directamente con alguien que venda o alquile el tipo de propiedad que está buscando. para. La gran ventaja aquí es, obviamente, el importante ahorro en honorarios de agencia. Pero hay un pero…
La gran desventaja de este enfoque es la ausencia de un profesional que oriente y asegure el proceso. Para solucionar este problema, no podemos recomendar lo suficiente el uso de los servicios de un abogado de habla francesa, especialmente si está considerando realizar una compra. En España, el papel del notario difiere significativamente del que conocemos en Francia o Bélgica, lo que puede complicar los trámites sin el apoyo adecuado.